miércoles, 4 de junio de 2014

Desarrollo sostenible

A partir de la década de los 70, los científicos empezaron a darse cuenta de que muchas de sus acciones producían un gran impacto sobre la naturaleza, por lo que algunos especialistas señalaron la evidente pérdida de la biodiverisad y elaboraron teorías para explicar la vulnerabilidad de los sistemas naturales.
El desarrollo sostenible se basa en tres factores: sociedad, economía y medio ambiente. En el informe de Brundtland 1987, se define como sigue:

Satisfacer las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer las posibilidades de las del futuro para atender sus propias necesidades.

El ámbito del desarrollo sostenible puede dividirse conceptualmente en tres partes: ecológico, económico, y social. Se considera el aspecto social por la relación entre el bienestar social con el medio ambiente y la bonanza económica. El triple resultado es un conjunto de indicadores de desempeño de una organización en las tres áreas, pero que tiene cuatro dimensiones básicas:
  • Conservación.
  • Desarrollo (apropiado) que no afecte sustantivamente los ecosistemas.
  • Paz, igualdad y respeto hacia los derechos humanos.
  • Democracia.
Se deben satisfacer las necesidades sociales y de la población, en lo que concierne a alimentación, vestimenta, vivienda, y trabajo, pues si la pobreza es habitual, el mundo estará encaminado a catástrofes de varias clases, incluidas las ecológicas y las humanitarias. Asimismo, el desarrollo y el bienestar social están limitados por el nivel tecnológico, los recursos del medio ambiente, y la capacidad del medio ambiente para absorber los efectos de la actividad humana.
Ante esta situación, se plantea la posibilidad de mejorar la tecnología y la organización social, de forma que el medio ambiente pueda recuperarse al mismo ritmo que es afectado por la actividad humana, para de tal forma evitar un déficit de recursos.


En resumen, el desarrollo sostenible o sustentable es un concepto desarrollado hacia el fin del siglo XX. Es una alternativa de reestructuración del concepto de desarrollo y procura la reconciliación entre el crecimiento económico, los recursos naturales y la sociedad. Es relativo al interés público en que se permite el crecimiento económico y el uso de los recursos naturales a nivel mundial, pero teniendo muy en cuenta los aspectos medioambientales y sociales globales, para que en el largo plazo no se comprometa ni se degrade sustantivamente ni la vida en el planeta, ni la calidad de vida de la especie humana.



Fuente: Wikipedia

sábado, 26 de abril de 2014

Lucha Biológica: Protección de aves insectívoras mediante nidales artificiales

La utilización de enemigos naturales (parásitos, predadores y enfermedades), en la lucha contra los insectos perjudiciales contribuye a la prevención de la explosión de plagas y a la reducción de focos de insectos nocivos para el arbolado y su mantenimiento en niveles asumibles por el ecosistema.

nidos

En esta línea, las aves insectívoras han sido muy estudiadas. Algunas de ellas como los "picapinos" o pájaros carpinteros construyen los nidos con sus potentes picos; los herrerillos, carboneros, trepadores, agateadores, colirrojos, papamoscas, etcétera, son trogloditas, es decir, utilizan los huecos naturales que se producen en el tronco y ramas gruesas de los árboles para nidificar y para protegerse de las inclemencias atmosféricas o de la acción depredadora de sus enemigos naturales.La importancia de estas aves está claramente reflejada al estudiar los estómagos de páridos en los que se hallaron grandes cantidades de orugas de Tortrix viridiana o Catocala sp. entre otros, o en orugas de Thaumetopoea pityocampa (procesionaria del pino) en sus primeros estadios, muy frecuentes en las aves insectívoras estudiadas en otoño-invierno. Se ha llegado a estimar que la cantidad de insectos consumidos por una pareja de estos pájaros en un año puede ser hasta de 5 kg.

nido
Estos resultados son demostrativos de la utilidad de estas aves en el mantenimiento del equilibrio biológico natural en el monte, lo que justifica por sí mismo la colocación de nidales artificiales en masas arboladas. Estos nidales suplen con éxito la carencia de huecos naturales, lográndose así un incremento generalizado en las poblaciones de aves insectívoras trogloditas y su estabilidad y permanencia en el ecosistema forestal, con el consiguiente beneficio que ello representa en la lucha contra insectos nocivos en las masas forestales.


nido
Objetivos:
  • Utilización de los nidales para aves insectívoras con objeto de mantener el equilibrio biológico natural en el monte.
Actividades y Tareas:
  • Colaboración con las comunidades autónomas en el desarrollo y promoción de métodos de lucha biológica (protección de aves insectívoras).
  • Suministro de nidales para colaborar en las campañas de protección de aves insectívoras, mediante el fomento de sus poblaciones. Esta campaña está dirigida a Sociedades Conservacionistas, Grupos Ecologistas, Universidades, Escuelas de Profesionales, Ayuntamientos, Centros Educativos, Campamentos Estivales, Aulas de la Naturaleza, Asociaciones Juveniles y en general cualquier particular interesado.


Fuente: MAGRAMA

miércoles, 23 de abril de 2014

Soporte de la producción agrícola, forestal y ganadera


Además de la aportación directa de alimentos, los bosques y sus árboles desempeñan un papel crucial asegurando la producción agrícola y ganadera, manteniendo los principales recursos naturales: agua y suelo, y proporcionando equilibrio ecológico en el sistema.

En ocasiones los bosques y sus árboles lindan con sistemas agrícolas, llegando a formar parte de ellos y protegiéndolos. Sostienen buena parte de la carga ganadera suministrando forraje, especialmente durante las carencias del estiaje típico de nuestro clima mediterráneo.

Resulta preocupante observar cómo la actividad agrícola y la forestal son con demasiada frecuencia tenidas en cuenta como enemigas. Este error puede estar basado en el pensamiento vulgar de tomar a la agricultura como la que se dedica a cultivar campos abiertos para obtener cosechas, y que la actividad forestal se simplifica a gestionar los bosques para la producción de madera. De hecho, agricultura y actividad forestal se benefician mutuamente, e incluso son interdependientes.

Por lo tanto, los bosques y sus árboles desempeñan un papel inequívoco como soporte del sistema agrícola, y principalmente el agroforestal. Claro ejemplo lo tenemos en las dehesas extremeñas que, con una adecuada gestión sostenible son fuente de multitud de recursos.